La "High Life" en Bolivia es una sátira de la élite boliviana, explorando distintos tipos de "jailones" y su relación con el racismo, clasismo, y el legado colonial en la identidad social.
El Gobierno masista invirtió casi 1/4 de los fondos de jubilación en el Tesoro General de Bolivia y bonos, a pesar de ser inversiones riesgosas y advertencias de agencias calificadoras sobre la situación económica del país.
Los miembros de la Asamblea Legislativa de Bolivia son criticados por su falta de competencia y debilidad política, lo que ha llevado a una gestión pobre y decisiones económicas desastrosas. Bolivia necesita urgentemente mejores políticos.